Ciudad del Vaticano. El Papa Francisco ha suspendido su agenda para este lunes por precaución ante los síntomas gripales persistentes, después de que este sábado también anulase sus compromisos por esto mismo. «Persisten los leves síntomas gripales, sin fiebre.
Por precaución, en cualquier caso, se han suspendido las audiencias de esta mañana», ha explicado la Oficina de prensa de la Santa Sede en un escueto comunicado.
Francisco, que tiene 87 años y que el 13 de marzo cumplirá once como Papa, rezó el Ángelus de forma habitual este domingo, si bien el sábado también tuvo que cancelar su cita con los diáconos de la diócesis de Roma. El Pontífice debía retomar su actividad tras el parón de la semana pasada cuando estuvo retirado en el Vaticano para los ejercicios espirituales de cuaresma, durante la que no mantuvo ningún encuentro público, ni siquiera la audiencia general de los miércoles.
Leyó la oración ante los miles de fieles reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano con buena voz. Después suplicó «que se encuentre un poco de humanidad que permita crear las condiciones de una solución diplomática para buscar la paz en Ucrania», al recordar el segundo aniversario del inició de la invasión rusa.
A finales de noviembre, Francisco sufrió una bronquitis por la que tuvo que cancelar algunos actos previstos y evitar leer algunos discursos. Para su recuperación, el Santo Padre finalmente no viajó a Dubái para participar en la cumbre del clima. Después se recuperó totalmente, e incluso el 8 de diciembre acudió a la plaza de España al tradicional homenaje a la Inmaculada.
