La policía asesinó a un hombre que abrió fuego en un campamento infantil en la localidad de Duncanville, en el estado de Texas, Estados Unidos, en el que se encontraban cerca de 250 niños.
Según un comunicado del cuerpo policial el sospechoso fue herido por los agentes policiales que llegaron de inmediato al lugar del incidente, pero este murió en el hospital a causa de sus heridas.
«El sospechoso fue herido durante el tiroteo. (…) La Policía prestó de inmediato los primeros auxilios antes de que (el sospechoso) fuera trasladado al hospital, donde murió», comunicó la policía e informó que ningún niño, personal del campamento u oficial resultó herido durante el tiroteo que se generó este lunes.
El hombre, que fue identificado este martes como Brandon Keith Ned, de 42 años, y residente de Dallas, según información de la policía, ingresó al vestíbulo del centro deportivo donde se realiza el campamento de verano con una pistola y disparó durante una discusión con un miembro del personal.
Posteriormente, Keith Ned intentó ingresar a un salón de clases donde habían niños de 4 a 14 años, pero la puerta estaba cerrada.
«Debido a la investigación en curso que está llevando a cabo el Departamento de Seguridad Pública de Texas, el Departamento de Policía de Duncanville no divulgará ninguna información adicional sobre el sospechoso o el incidente del tiroteo en este momento», dijo la policía de Duncanville en un comunicado publicado este martes por la tarde.
Un testigo dijo a la cadena estadounidense NBC que el hombre llegó hasta el salón donde se encontraba y disparó contra la puerta, rompiendo un vidrio, y amenazando que si no lo dejaban ver «a quien quería ver balearía el lugar».
